Paradigmas » ¿Existían Universidades en la América Prehispánica?, Alberto M. Zorrilla

Última actualización: 20/08/2009

¿EXISTÍAN UNIVERSIDADES EN LA AMÉRICA PREHISPÁNICA?

Alberto M. Zorrilla   (*)
 
 
1.      Introducción
2.      Fundamentación
5.      Cuadro comparativo
7.      Bibliografía
A mis ancestros americanos.
A mis comprovincianos Wichí, Pilagás y Qom (Tobas)
por haberme enseñado a mirar a las personas en una dimensión integral.
 
 
Al estudiar la historia de las universidades, generalmente, el tema se centra en la de las escuelas europeas, por ende de su cultura, que luego, de la mano de la de Salamanca se expandieron al continente americano. Se advierte que no existe información suficiente para dar cuenta de la existencia o no de estudios sistemáticos en la América prehispánica además de soslayarse las referencias a la cultura de los pueblos americanos originarios. De allí surgen las preguntas:
·¿Existían algo similar a nuestras universidades en los tiempos precolombinos?
·Si así fuera, ¿quiénes las tuvieron?.
·¿Con qué objetivos?
Las civilizaciones americanas precolombinas más destacadas como la Inca, Maya y Azteca, entre otras que las precedieron, dejaron huellas notables en distintas expresiones arquitectónicas, culturales, científicas, etc. en las que se observa que alcanzaron un grado de desarrollo superlativo.
Todo ello implicaba la presencia de un Estado y éste debía ser conducido y administrado en sus diferentes expresiones, como la economía, los asuntos de la guerra y la paz, y los temas que hacen a la vida de una comunidad organizada. Para ello se necesitaban personas entrenadas en las diferentes disciplinas. ¿Las tenían?.
Es muy difícil imaginar un Estado de tal complejidad administrado por una sola persona. En esta línea de pensamiento, José de Vasconcelos, citado por Enrique Oltra en Paideia precolombina, profundiza aún más cuando dice"...dondequiera que ha habido arquitectura, ha existido también filosofía; no se llega a construir, con gracia y ligereza, con majestad y armonía, mientras no se conquista en lo espiritual, el orden armónico y sólido de una doctrina filosófica coherente y comprensiva".
De aquí que se generen algunos interrogantes:
·¿Cómo generaban, mantenían y transmitían los conocimientos?.
·¿ Tenían un sistema educativo estructurado y sistematizado?.
·Si así fuera, ¿quiénes lo administraban? ¿dónde se desarrollaban?
·¿tenían edificios especiales, dedicados a los estudios?
·¿quiénes accedían a esa educación?
·¿Qué papel desempeñaban los padres?
Esta investigación pretende ser una aproximación teórica tendiente a aportar elementos para plantear la discusión sobre las formas de generación, conservación y transmisión de los conocimientos de nuestros antepasados americanos.
METODOLOGÍA
Esta es una investigación mixta y secundaria, un rastreo literario y bibliográfico sobre las civilizaciones Maya, Azteca e Inca. Los datos se obtuvieron de textos facilitados por la Biblioteca Pública Dr. Ruiz Moreno de la ciudad de Formosa, libros que fueron prestados por personas interesadas en el tema y revisión de páginas halladas en Internet. Todos ellos invitan a asomarse a un mundo fascinante que está descrito gracias a algunos europeos, principalmente españoles, clérigos muchos de ellos, que se interesaron en conocer esas culturas que estaban siendo avasalladas por la poderosa presencia extranjera; quisieron conservar parte de esa historia indagando a los naturales que, ante el interés de personas bien intencionadas abrían sus memorias en floridos relatos; la arqueología también ha aportado mucho material, sin olvidarnos de la antropología que ha encontrado huellas de esos pueblos que aún persisten, vestidos con otros ropajes, en los pliegues de las expresiones populares latinoamericanas y en el inconsciente colectivo que lo diferencia de los otros pueblos del mundo.
Los principales documentos que nos cuentan cómo eran, qué sentían, cómo vivían, a quiénes rezaban, cómo amaban nuestros antepasados, no estarían a mano de un curioso cualquiera si no fuera por el esfuerzo de algunos historiadores como Enrique Oltra o.f.m, Sylvanus Morley, y muchos otros que se tomaron el trabajo de estudiar y recopilar información de obras del siglo XVI como los distintos "Códices" como el Mendocino, Chimalpopoca, Ramírez, Florentino, Matritense del Real Palacio, Peresiano, etc. que como la mayoría de los tesoros americanos están guardados en alguna biblioteca europea; abrevando también en historiadores de la talla del Inca Garcilaso de la Vega , Fray Bernardino de Sahagún, Fray Andrés de Olmos, Mariano Cuevas, el Obispo Landa y tantos otros.
Para la fiabilidad de los datos se tuvieron en cuenta aquellos coincidentes en los diferentes autores.
Si bien hay rasgos comunes en todas las civilizaciones americanas, tienen características particulares interesantes de detallar; para ello se estudiaron los pueblos Azteca, Maya e Inca, por haberse hallado mejor material bibliográfico y porque aún permanecen vivos.
Para comprender mejor los rasgos singulares de la educación de esos pueblos se esbozan primero sus características generales y primordiales, separándolos en:
- Orígenes.
- Estructura social.
- Sistema educativo.
 
 
LOS MAYAS
Diversos historiadores coinciden en considerarlo el pueblo más intelectual del mundo precolombino.
Orígenes:
Habitaron las actuales regiones de Chiapas, la península del Yucatán en México, parte de Guatemala, Belice, parte de Honduras y El Salvador. Es uno de los pocos pueblos americanos en el que se pueden establecer fechas ciertas de sus épocas históricas a partir del 353 a.C. gracias al extraordinario calendario que nos legaron. Así se puede reconocer:
1.-Epoca Preclásica o período Formativo que va entre la fecha citada y alrededor del 370 d.C. donde se desarrolla la cerámica, el arte de las lápidas, tumbas elaboradas y las grandes subestructuras de templos de mampostería.
2.- La época Clásica o serie Inicial que se extiende hasta el 950 d.C. donde se establecen relaciones comerciales más fluidas con Teotihuacan, se distingue la cerámica policroma de gran belleza, esculturas en piedra, desarrollo de la técnica de la bóveda en las construcciones.
3.-La época Post-clásica o Período Mexicano hasta los primeros años de 1500 d.C. en que se desarrolla la conquista Tolteca; se nota una decadencia y abandono de la región, ya no se construyen centros religiosos, sí sitios fortificados en las cumbres de los cerros se abandona el centro de Chichén Itzá y se traslada la capital a Mayapán, se disgrega el gobierno central.
4.- En 1527 comienza la conquista española que culmina alrededor de 1697.
Varias versiones concuerdan en que fueron asolados por varias epidemias y fenómenos climáticos que motivaron al pueblo maya a abandonar sus ciudades, magníficas construcciones, más pequeñas que las aztecas, pero elaboradas con más delicadeza. Las llamaron ciudades-templos como Tikal, Uacatún, Chichén Itzá, Uxmal, cuyas magnificiencias plasmaron los rasgos peculiares del espíritu del pueblo maya.
Estructura Social:
Los mayas desarrollaron una escritura jeroglífica y silábica, según últimos estudios, que aún no fue descifrada en su totalidad. Podemos inferir algunos rasgos de su estructura social del libro Popol Vuh, del Códice de Dresde, el Códice Tro-Cortesiano, el Códice Peresiano o lo que se han dado en llamar los Libros de Chilam Balam, que se salvaron de la destrucción fanática de algunos fundamentalistas católicos de la conquista europea como Fray Diego de Landa que sin embargo supo relatar usos y costumbres de los mayas en su Relación de las cosas de Yucatán.
Estos Libros de Chilam Balam merecen un pequeño relato: cuando llegaron los clérigos españoles, su preocupación fue enseñar a los mayas a escribir su propia lengua con el alfabeto castellano, solamente tuvieron que agregar dos letras para representar los sonidos del maya, la x que se usó para representar el sonido sh, y una c invertida que actualmente se escribe dz; contra lo que esperaban los europeos, los mayas aprovecharon para escribir profecías, mitos, leyendas, rituales, sinopsis cronológicas de su historia y sucesos corrientes. Estos manuscritos fueron recopilados, algunos en forma fragmentada y le dieron ese nombre genérico de Chilam Balam que significa algo así como "el libro adivino de las cosas ocultas".
La religión imbuía la existencia diaria de los mayas que creían que el mundo fue fundado por Hunab o Hunab Ku, que significa único dios, y que la humanidad fue creada a partir del maíz, por eso también a los mayas se los conoce como "hombres de Maíz", ya que éste era el alimento principal, objeto y fin de su trabajo y eje de su organización comunitaria. Que existieron otros tres mundos anteriores al actual, que fueron destruidos por diluvios. La creación estaba estructura en capas superpuestas por lo que existían 13 cielos. Si bien creían en un dios creador, éste se hallaba muy alejado de la consideración diaria de la gente, que al principio tenían una religión muy simple basada en la personificación de las fuerzas naturales que los rodeaban, donde el sacerdote era el jefe de la familia; a medida que se desarrollaba la organización social, alrededor del maíz, la religión también se fue organizando y los dioses se fueron especializando, lo que necesitó la creación de un sacerdocio que interpretara los deseos divinos y la construcción de lugares de adoración, con un ritual cada vez más complicado.
Por su gran apego a la naturaleza desarrollaron la capacidad de observación del firmamento, donde habitaban sus innumerables divinidades en los diferentes cuerpos celestes: era un culto del tiempo, que a su vez también era del espacio, ya que parece que los interpretaban como una unidad, por ello utilizaban la misma palabra para nombrarlos a ambos: Kö, de allí que se infiere que los calendarios no solamente se referían al paso del tiempo sino que los días tenían una dimensión espacial.
Sus sacerdotes estaban organizados estrictamente y conocían de astronomía, matemáticas, administración y estadísticas, además de ser profetas y maestros de los rituales. En su afán de calcular las fechas propicias para los casamientos, bautismos, siembra, cosecha, y demás acontecimientos por nimios que fuesen, llegaron a grandes avances en la astronomía, desarrollando el calendario más exacto de todos los tiempos, tan complejo que hasta tenían un calendario religioso y otro civil y la manera de relacionar a ambos.
Las matemáticas, con un sistema numeral, vigesimal, más sencillo que el romano, basado en puntos con un valor 1 y rayas con valor 5, desde el cero hasta el 19. Para escribir los números superiores a 19 usaban un sistema de numeración de posiciones. Obtuvieron el concepto del cero muchos siglos antes de su introducción en Europa por parte de los árabes. Usaban los pares, impares, adición, potencia y otros signos aún no descifrados. Aplicando estos conocimientos al calendario podían llegar a contar hasta 23 mil cuarenta millones de días.
El año solar maya duraba 365,2420 días, según la astronomía moderna la duración es de 365,2422 días; la misma exactitud lograron en la duración de una lunación; con la revolución sinódica de Venus que calcularon en 584 días, que por parecerles excesivo lo corregían cada 5 años, aprovechando su coincidencia con 8 años solares. El cálculo moderno es de 583,920 días. Se acepta también que tenían su propio zodíaco.
Tenían conocimientos del uso médico de los vegetales y prácticas quirúrgicas.
Sistema educativo:
Todos estos complejos conocimientos debían haber sido transmitidos e incrementados.
Si bien no se conoce con exactitud el sistema educativo, se tienen noticias que la familia cumplía un rol fundamental ya que los jóvenes solían seguir el oficio de los padres, quienes además le inculcaban la importancia y la dignidad de su oficio, el respeto de las cosas ajenas, el cuidado de la vida de los otros y el rechazo del adulterio; las mujeres eran entrenadas por sus madres en la cuestiones del manejo de la casa, las diferentes maneras de utilizar el maíz, haciendo hincapié en las virtudes morales, el recato, el sentido de la maternidad, la higiene, la religiosidad y el amor al trabajo. El relato de leyendas era el recurso didáctico para transmitir sus conocimientos.
El obispo Landa refiere que todos los pueblos tenían una casa donde se alojaban jóvenes, al parecer eran como nuestras casas de pupilos, donde les impartían algún tipo de enseñanza. Estudios recientes interpretando el Popol Vuh, hablan de instituciones similares a las aztecas llamadas Camecatl o Casa del Mecate, donde se enseñaban las ciencias. Mecatl, en náhuatl, introducido por los mexicas, o mecate es un hilo obtenido de la fibra del magüey, con el que tejen sus redes. Al parecer utilizaban estas redes para cuadricular el cielo y de esta manera poder estudiarlo mejor. Aplicando los principios que regían la urdimbre de sus tejidos llegaron a dominar las artes de la astronomía y las matemáticas. Algunos interpretan que, como el hilo une y envuelve todas las cosas, el nombre simbolizaría la visión holística del conocimiento, ya que para los mayas todo se originaba y bajaba del cielo, todo estaba escrito en el cielo, solamente había que saber interpretarlo. Así por ejemplo, descubrieron que al expresar los números en forma de pirámides se facilitaban los cómputos.
Desarrollaron además un gran sentido estético, lo que se puede comprobar por los exquisitos frescos y detalles refinados de la ornamentación de los templos.
La organización social y productiva se desarrollaba en torno de la milpa, que es, hasta hoy, la forma maya de producir maíz. Se tienen datos de una estructura social clasista pero aún no se podido develar su organización política.
 
LOS AZTECAS
Orígenes:
El pueblo mexica o azteca aparece en la geografía mexicana como un pueblo errante, algunos dicen que venían de una isla de una laguna llamada Aztlán probablemente ubicada en la actual provincia de Nayarit, en busca de un lugar donde asentarse y de un destino manifestado por su Dios tribal conocido por el nombre de Huitzilopochtli. Aparecen en el valle de México ante el asombro de los otros habitantes, que no los conocían, tanto es así que los llamaban los sin rostro, por lo que eran resistidos, combatidos, expulsados; pero los mexicas seguían avanzando, conducidos por cuatro lideres religiosos llamados "teomamas", buscando los signos y señales que indicaran su lugar en el mundo que su Dios les había prometido, hasta que llegaron a orillas de un lago donde vieron un águila parada sobre un nopal (tuna) que aferraba en una de sus garras a un pájaro. Con gran alegría reconocieron las señales divinas y allí se quedaron fundando la ciudad de Tenochtitlán que significa tunal en piedra y adoptaron como bandera la figura del águila que les dio la bienvenida a la que sería la capital de un vasto y respetado imperio. Hay que destacar que la misma águila todavía se mece en la bandera de la actual Nación Mexicana.
Los autores modernos calculan que dicha fundación sucedió alrededor del año 1345 de la era cristiana. Diez reyes se sucedieron hasta que llegaron los españoles que observaron con estupor y asombro las expresiones arquitectónicas, organizativas, militares, culturales del imperio que con obstinación mesiánica construyeron los mexicas.
Todos los pueblos que habitaban el territorio mesoamericano tenían como rasgo común la cultura náhuatl o nahua, pasando por diversas etapas de desarrollo, de allí que se puede decir que lo náhuatl es lo general y lo azteca o mexíca, lo tolteca, chichimeca, texcocano, etc. es lo particular.
El pueblo azteca se sentía impulsado a cumplir la misión que su Dios Huitzilopochtli le había encomendado: ser sus colaboradores en la obra maravillosa de proporcionar, con el sacrificio de la vida humana, la luz al mundo, ser faros de la humanidad. La fe ciega en esta misión tan particular, configura y condiciona la vida diaria del azteca ya que se transforma en el ideal principal que la sociedad tratará de entregar a sus miembros como uno de sus valores principales. Para hacerlo establece un sistema educativo que comienza en la familia y se continúa sin interrupciones con los centros educativos para niños y luego para los jóvenes, donde se empeñarán en formarlos con "rostro sabio y corazón firme", supremo ideal, fruto de la realización plena del azteca como persona.
La visión místico-guerrera de la vida es una construcción genuinamente azteca contribuyendo a la cultura nahua con costumbres y tradiciones, generando un arte típico que expresa un mundo eminentemente religioso, ordenado y seguro.
Estructura social:
La organización del estado se basaba en el calpulli, que es el fundamento de su organización social y política. Su origen se pierde en la historia. Alonso de Zurita, citado por Oltra, op. cit., nos cuenta: "...porque "calpulli" o "chinancallec", quiere decir barrio de gente conocida, o linaje antiguo, que tiene de muy antiguo sus tierras y términos conocidos, que de aquella cepa, barrio o linaje, y las tales tierras llaman "calpulli", que quiere decir tierras de aquel barrio o linaje"...
Era un conjunto de familias que compartían los mismos vínculos de sangre, con antepasados comunes, de territorio, porque esa fracción de tierra era de propiedad común, religioso porque todos adoraban al mismo Dios tribal, aunque también tenían otros dioses menores en el panteón familiar, y el destino histórico impuesto por Dios, transmitido a sus sacerdotes y comunicado por éstos al pueblo. Con el correr del tiempo y afianzados los límites primigenios del Estado, aceptados por los pueblos vecinos, quienes habían sido avasallados o mantenían buenas relaciones por conveniencia o temor a su poderío militar, se transforman en agricultores, transformando sus calpullis en unidades de producción para satisfacer sus necesidades. Hay que aclarar que el jefe del calpulli otorgaba a cada familia una parcela que debía cultivar, no podían venderlas ni transferirlas a gente de otros calpulli, ni dejar de trabajarlas por dos años contínuos sin motivos valederos. La familia constituía la fuerza de los calpulli, está vinculada por el afecto, el apego a los valores tradicionales, la preocupación por la continuidad de la raza, el culto a sus dioses, la fe en sus libros de códigos, donde estaban escritas sus creencias, y sus valores morales comunes aceptados sin discusión. Son los "mayores" los responsables de transmitir la cultura a sus jóvenes. Esta organización condicionará la comunidad política. Si bien el rey, jefe del estado monárquico teocrático-militar, ejerce el mando supremo, su autoridad se basa en el apoyo de los representantes principales de los calpulli. Tanto es así que la sucesión al trono, si bien es familiar, no guarda apego irrestricto al primogénito, sino que es elegido el más capaz y mejor dotado de los hermanos.
El calpulli no es solamente una unidad económica sino que es una concepción de la vida ya que se empeña en forjar un ideal de hombre concreto.
Sahagún, según Oltra, op.cit., transmite lo que sus amigos aztecas le relatan en forma de versos:
"El hombre madura:
corazón firme como la piedra,
corazón resistente como el tronco de un árbol,
rostro sabio
dueño de un rostro y un corazón,
hábil y comprensivo"
 
Cuando se refiere a la mujer no se olvidan de la feminidad:
 
"La mujer ya lograda,
en la que se ponen los ojos.....
la feminidad está en su rostro".
La civilización europea, influida por los griegos, destaca el carácter racional de la persona, en cambio la civilización nahua comprende al hombre en su totalidad, con una visión holística destaca la fisonomía moral y el principio dinámico. Lo moral expresada en el rostro y la acción que parece provenir del corazón. Ideales de lealtad, corrección, servicio, solidaridad constituyen el objeto de la educación que se expresan en la palabras "ixtlamachiliztli": "acción de dar sabiduría a los rostros" y en las prácticas que llevan a la "yolmelahualiztli": "acción de enderezar los corazones".
Sistema educativo:
Para apoyar a las familias en cada calpulli había un templo y una escuela, que era la expresión visible de un sistema educativo con carácter universal y obligatorio, ya que todos los niños, varones y mujeres por separado para resguardar las características propias de cada género, eran llevados a recibir conocimientos sistematizados a partir de los 5 años según algunos autores y de 6, 7 años para otros, lo importante es que todos iban a la escuela que estaba adosada al templo. La familia se encargaba de formar a los niños en los hábitos del estoicismo, con prácticas de fortalecimiento físico y mental, apego al trabajo, la disciplina y la vida en comunidad, con fuerte insistencia en los aspectos del recato y el respeto entre los de diferente sexo. Ponían especial énfasis en desechar el ocio y la vida muelle, en esto no había diferencia de clases. Los castigos corporales los imponían, al perecer solamente los padres, recién desde los 8 años a los niños negligentes y ociosos, antecediendo amonestaciones y amenazas del castigo. Poniendo cuidado en no ofender el pudor de las niñas, preciado valor moral.
Así se combinaban las enseñanzas de la familia, que ponía especial esmero, y las escuelas de los calpulli.
A partir de los 15 años se iniciaba otra etapa de la formación, ingresando a instituciones llamadas Calmécac o calmecatl, Telpochcalli y Cuicacalli. Si bien se daba una educación más esmerada a los hijos de los nobles, se hacía un seguimiento de los jóvenes plebeyos y en quienes detectaban inclinaciones y cualidades destacadas se los ingresaba en estas casas de altos estudios. Estas casas se diferenciaban al parecer por los objetivos que perseguían. Si bien no está muy claro parece que a los Calmécac ingresaban los que querían seguir la vocación religiosa que por el particular sentido mesiánico del pueblo, también tenían funciones rectoras de la sociedad mexica.
Los que se inclinaban hacia la vida militar y otros oficios concurrían a los Telpochcalli, por ello se diferenciaban también por la divinidad a los que estaban dedicados: a Quetzalcóatl el Calmécac y a Tlaltecutli o Tonatiuh, dioses de la tierra y el sol para el Telpochcalli, otros autores le asignan la protección de Tezcatlipoca, dios que le gustaba enemistar a los hombres generando las guerras.
El Calmécac era un centro de formación integral no solo moral sino también de instrucción elevada como la enseñanza de la lectura de los libros sagrados, astrología, astronomía, matemáticas, escritura y todo lo que nutría la cultura nahua, en su compleja cosmovisión.
Era la escuela de enseñanza superior donde se impartían conocimientos sobre:
·         Retórica
·         Arte dramático
·         Música, canto
·         Danza
·         Escritura
·         Astrología
·         Historia
·         Administración de Justicia
Los Cuicacalli eran centros de enseñanza especializada en especial en todo lo referente a cultura musical y los cantos sagrados.
El Telpochcalli que significa "casa de jóvenes o mancebos" eran los centros educativos para la mayoría del pueblo, principalmente de las capas sociales medios y profesionales, donde se ponía énfasis en la educación militar
Con referencia al aprendizaje de los oficios, ésta comenzaba en el ambiente familiar donde el padre transfería los conocimientos a los hijos varones y las madres a las niñas. Para la concepción nahua el oficio se carga de filosofía por que trata de infundir a la materia que labra un espíritu humano. Por ejemplo el pintor no debe buscar solamente retratar las cosas, sino que debe poseer una mística, por la cual transmitir su espíritu a las cosas y así poder humanizarlas, y de esta forma igual con todas las profesiones.
Al tener escritura ideográfica encontraban muchas limitaciones para simbolizar los matices y modalidades de la expresión humana, por ello adoptaron un método de aprendizaje basado en la memorización y la reiteración, que practicaban en toda ocasión: al nacer un niño, en la presentación en la escuela, al elegir el compañero de la vida, en las danzas, teatros, fiestas religiosas, sacrificios, todas ellas eran oportunidades de transmitir sus convicciones religiosas, los valores morales y culturales, etc. lo que constituía una educación permanente y contínua ya que no se circunscribía a los establecimientos educativos sino que impregnaba la habitualidad azteca.
 
LOS INCAS
En el subcontinente sudamericano también se desarrollaron varias civilizaciones, con diferentes grados de florecimiento, algunas de ellas fueron los antecedentes de otras, como mojones de la evolución hasta llegar al pueblo Inca, que a la par de su maduración técnica, administrativa, religiosa, económica, militar, cultural construyeron un vasto imperio que llegó a ocupar casi todo el territorio andino, en lo que hoy son las repúblicas de Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y el Noroeste de Argentina, (del Quitu a Chili y Tucma, al decir de los de la época) con epicentro en la Ciudad de Cuzco, capital del Imperio, "abuela del continente" y foco de irradiación de su cultura.
Así como los Incas se desplazaban por el "espinazo" de Sudamérica, los Guaraníes lo hacían por las zonas de serranías más bajas y los grandes bosques orientales, desde el Río de la Plata hasta las islas del Caribe pero sin que nos dejaran legados arquitectónicos, ni escrituras, al parecer por falta de una vocación imperial, sólo una lengua que hasta hoy persiste en los pueblos que los sobreviven.
Sobre los Incas, cuyas obras hasta hoy se siguen descubriendo nos hablan varios autores como Blas Valera, Garcilaso de la Vega, José de Acosta, Fernando de Montesinos, Pedro Sarmiento de Gamboa, Alfredo Metraux, etc.
Orígenes:
El origen de los Incas, así como de su espléndida capital, El Cuzco, se pierde en el misterio de las leyendas, así hay dos versiones que les servían de paradigma y modelo que alimentaban el orgullo de la grandeza de su pueblo:
1.         La leyenda del lago Titicaca
2.         La leyenda de los hermanos Ayar
Las dos tienen en común que se refieren a parejas enviadas por el Sol, padre de los incas, a ordenar la vida de los hombres que se debatían en la ignorancia y en condiciones de vida infrahumanas. Tenían como misión instruirlos en el culto al sol, dictado de preceptos, y normas de conducta que los lleven a una organización social fecunda. En la primera de las versiones los personajes eran Manco Cápac y Mama Oello, así llegaron hasta un lugar que les pareció propicio donde fundaron Cuzco.
En la otra versión nuestro personaje central se llama Ayar Manco, su esposa Mama Oello pero aparece acompañado por sus hermanos: Ayar Cachi y su esposa Mama Huaco, Ayar Uchu y su esposa Mama Cora y Ayar Auca y Mama Rahua quienes, aquí las leyendas difieren, salieron de un cerro y tras varias vicisitudes donde tres hermanos mueren en diversas circunstancias llegan al lugar donde fundan la posterior Gran Capital, Cuzco.
Los historiadores interpretan que la primera versión hace referencia a la conquista del lugar por parte de los Kollasaymaras y la segunda a cuatro tribus: los maras, los tampus, los mascas, los chilques, que luego se fusionaron, después de dirimir sus diferencias donde prevalecieron los mascas, de allí la muerte de los tres hermanos de Manco. Estas serían las bases del grupo humano que luego pasarían a ser conocidos como Incas.
Las dos versiones coinciden en que Manco Cápac se dedicó a instruir a los varones los oficios considerados propios, como las artes de la agricultura, el aprovechamiento alimentario de lo producido, el oficio de hacer herramientas apropiadas, como el arado, la forma de conducir el agua desde sus fuentes hasta los cultivos, etc. En tanto Mama Oello tomó en sus manos la enseñanza de las mujeres en los oficios de la economía familiar, a hilar y a tejer algodón y lana, confeccionar vestidos para toda la familia. Así, el Inca Rey fue maestro de varones y la Coya Reina de las mujeres, en todos los aspectos que hacen a la vida humana.
Este relato marca el rasgo principal del sistema pedagógico que posteriormente se desarrolló: la verticalidad.
En la persona del Inca se concentran la autoridad real, sacerdotal y del magisterio, base de la política educacional, a partir de la cúpula política, ya que la nobleza es la depositaria de los conocimientos científicos.
Los incas, como todos los pueblos no nacieron por generación espontánea, fueron la síntesis de los logros culturales, espirituales y materiales de los pueblos antecesores, como los de la cultura Chavin, del Tiahuanaco, de los Mochica Chimu, Nazcas, Paracas, de quienes tomaron diversos elementos, combinándolos en admirable sincretismo para obtener como resultado un nivel de civilización superior sustentado por grandes pilares como ser:
1.         Firme creencia en ser el pueblo elegido por dios, el Sol , su padre, para difundir su culto a los demás pueblos.
2.         El Inca como único representante y mediador del Dios Sol
3.         Fuerte y rígida organización política
4.         Organización económica basada en la propiedad comunitaria
5.         Los valores humanos perdurables como el trabajo, el apego por la verdad y el respeto de lo ajeno.
El ciclo histórico, que comienza en el 1200 d. de C. hasta el 1533 en que llega Pizarro, cubre casi tres siglos de historia americana durante los cuales se forjó una civilización admirable, cuyos logros, sobre todo distributivos, aún es anhelo del pueblo que con otro ropaje y bajo otro tipo de organización, pero con los mismos rasgos, el mismo color de piel y la misma lengua, insiste obstinadamente en recuperar.
Estructura Social:
La sociedad incaica se estructuró en forma piramidal, estrictamente jerárquica, en cuya cúspide, y en forma indiscutida, está el Inca, a quien se considera Hijo directo del Sol. En el siguiente nivel, hacia abajo, estaba la nobleza, que era de dos clases: a) de sangre, por ser parientes consanguíneos del Inca y b) de privilegio, todos aquellos que, sin ser de la familia real, el Inca distinguía por algún merecimiento. En la base de la pirámide estaban los siguientes grupos: a) los Atún Runas (agricultores), b) los Mitimaes (colonizadores, que eran enviados por el Inca a poblar los territorios conquistados e instruir a los pueblos incorporados al imperio), c) los Yanacunas (esclavos obtenidos en las conquistas, cuyas penas de muerte eran conmutadas por el servicio perpetuo a los nobles).
Cada pueblo conquistado era gobernado por un Curaca, designado por el Inca según sus méritos, los que se habían destacado en la reducción de los pueblos,"mostrándose más afables, mansos y piadosos, y más amigos del bien común", cuya principal misión era la de adoctrinamiento religioso, político y económico.
El Imperio tuvo como base el Ayllu, similar al Calpulli de los aztecas, imitado de la cultura del Tiahuanaco. Consistía en un grupo de familias de docientas a trecientas personas unidas por lazos de sangre, de territorio, de religión, de lengua, de intereses económicos, de totemismo, etc., dirigidos por un anciano destacado por sus virtudes personales de buen trato y rectitud. Los vínculos más fuertes eran la lengua, que era única: el quechua y la religión: el culto al sol.
Si bien las dos clases sociales, pueblo y nobleza, tenían límites bien marcados y eran muy estrictos, su fin era político y su uso tenía un objetivo social ya que no pretendió despojar a su pueblo. Si bien había desigualdad política no lo había en el aspecto económico ya que construyó un sistema de distribución equitativa, de tal modo que a nadie le faltara su sustento. El uso de la semilla del cacao como moneda, le hace decir a Pedro Martyr, citado por Ricardo Levene en su Historia de América:
" Oh, feliz moneda, que da al humano linaje una bebida suave y útil, y a sus poseedores los libra de la tartárea peste de la avaricia, porque no se la puede enterrar ni guardar mucho tiempo".
En esto, el Ayllu jugó un rol preponderante ya que regulaba la convivencia al interpretar y aplicar las leyes que emanaban de la autoridad imperial como las del trabajo: una de ellas indicaba que nadie estuviera ocioso, los niños comenzaban a los 5 años a realizar tareas acordes a su edad, aún los discapacitados hallaban tareas según su capacidad, el ocio era castigado en público y era motivo de mucha deshonra. Nadie se libraba del trabajo ni siquiera el Inca, los nobles ni la casta sacerdotal ya que otra ley decía:
" que para el tiempo de barbechar, sembrar, segar, guardar la mies, regar la tierra, así comunes como de particulares, nadie se excuse, sino que salga con su arado; y que desde el rey hasta el más bajo ciudadano se ocupe de la labranza de tierras o de huertos, a sus tiempos...".
Existían tres formas de trabajo:
a)     sistema regulado por la llamada "ley común" en la todos contribuían en la construcción de los edificios públicos, templos, puentes, caminos, labrar las tierras del estado, etc.
b)     la ley de "hermandad", que mandaba que todos los vecinos del Ayllu se ayudasen en las tareas agrícolas, construcción de las viviendas, etc
c)     la ley de Mitachanacuy que hacía una distribución equitativa del esfuerzo en las obras públicas de tal modo que cada persona trabajase lo que le correspondiera y no más, además establecía un sistema de rotación en los turnos de trabajo y de descanso.
Estas leyes derivaban de la organización de la economía en base a la propiedad comunitaria para lo que el Inca había distribuido las tierras del imperio en tres categorías:
1.         Tierras del Sol (trabajadas por todos los ayllus) destinadas al sustento de las clases sacerdotales.
2.         Tierras del Inca, de la nobleza. Eran las tierras del Estado.
3.         Tierras del Pueblo: estaban destinadas al sostenimiento de las comunidades.
Cada varón tenía como responsabilidad un cuarto de hectárea (un tupu) y a cada mujer la mitad, los que debían ser trabajados en forma obligatoria, controlados cada año.
Sistema educativo:
Al Inca Manco Cápac le tocó el papel de colonizador y legislador poniendo las bases del imperio, pero fue uno de sus sucesores, el Inca Sinchi Roca quien instituyó el sistema educativo que lo potenciaría. Avizorando el valor de la cultura y las ciencias se dedicó a crear escuelas y centros de altos estudios en la ciudad de Cuzco, tan es así que los españoles le dieron el nombre de barrio de las escuelas, lo que hoy llamamos ciudad universitaria, al lugar de la ciudad donde estaban instaladas. Los incas las llamaban "Yachay Huasi" que en quechua significa casa de enseñanza. En estas casas vivían los sabios y maestros llamados "amautas" y "harauec" referidos a los poetas. Tenían por misión enseñar las ciencias a los príncipes incas, a los de sangre real y a los nobles.
El Inca Roca dictó leyes referidas a la educación en todo el imperio, que influyeron en su consolidación.
La primera norma establecía el Kichua o Kechwa como la lengua oficial y general, la que debían conocer y practicar los miembros de la nobleza, los gobernantes, administradores de justicia, prefectos de obras y oficios, los mercaderes en forma obligatoria y opcional para el resto de los habitantes del imperio. La lengua tenía tal consideración que aquel que la dominara, sin importar la clase social, podía aspirar a cargos en la organización del estado.
La segunda ordenaba que se conociera la inclinación vocacional o habilidad de los jóvenes para ser instruidos en esas disciplinas y ejercerlas cuando llegasen a la edad madura, aunque lo más común fuera que siguieran los oficios de los padres.
La tercera mandaba que en todos los pueblos hubiera de todos los oficios y maestros, y si esto no fuera posible, que por lo menos tuvieran los oficiales y expertos en las especialidades necesarias para el desarrollo de las actividades propias según su producción dominante. Por ejemplo hiladores y tejedores de lana, de algodón, plateros, orfebres, etc.
Para consolidar la expansión del imperio, detrás de las fuerzas militares iban los colonizadores, los mitimaes, que además de ser agricultores, cumplían la tarea de maestros de actividades productivas, de lengua, de doctrina religiosa y de culto.
El nivel educativo superior tenía por objetivo la enseñanza de:
a.         los ritos, preceptos y ceremonias de la religión
b.         las leyes que ordenaban el estado, sus fundamentos, interpretación y formas de aplicación.
c.         Arte militar.
d.         Uso del calendario
e.         Uso del sistema de registro histórico y numérico, llamado quipu, que era su sistema de escritura que consistía en una serie de cordones de diversos colores, de tamaños distintos y dispuestos en un orden tal que por los distribución de los nudos que se le hacían y los colores, se registraban acontecimientos, negocios y todo lo que se quisiera quedara anotado. Era un sistema tan complicado que necesitaban maestros especializados, los Quipu Camayocs, para su interpretación.
f.           Uso de la lengua
g.         Crianza de los hijos y gobierno de sus casas
h.         Poesía, música, filosofía, astrología, medicina, etc.
Este nivel de educación estaba reservado a los nobles; los jóvenes del pueblo no quedaron fuera del sistema educativo, ya que recibían instrucción en las artes manuales, labores agrícolas, tradiciones y leyes del imperio, dogmas, usos y costumbres.
Las mujeres recibían una educación orientada al manejo de la casa, la crianza de los hijos y la economía familiar.
Uno de los sucesores, el noveno Inca, Yupanqui, llamado también Pachacútec, quien comenzó su reinado en 1438, profundizó la política educativa, aumentando la cantidad de las escuelas fundadas por Inca Roca, instalándolas no solo en el Cuzco sino también en todas las provincias del reino, incrementó la cantidad de maestros de tal modo que universalizó el uso del quechua. A la llegada de los españoles, todos los habitantes del imperio, cualquiera fuera su clase hablaban la misma lengua, que aún se mantiene en nuestros días. Otro cambio significativo que impulsó, fue el de instaurar el culto al dios Viracocha como principal divinidad, creador del hombre y de todas las cosas, relegando el culto del dios Sol a un segundo plano.
Los conocimientos tuvieron para los Incas, una utilidad práctica, así la geometría fue desarrollada para medir los campos, trazar los caminos edificar sus edificios, medir el tiempo y elaborar un calendario, menos preciso que el de los mayas, para determinar los tiempos de siembra y cosecha, la astronomía para sus festividades religiosas y labores agrícolas. La cirugía se centraba principalmente en la trepanación craneana, heredado de los paracas, el uso medicinal de las plantas también era objeto de estudio. Dieron mucha importancia a la lírica, el drama y la épica como instrumentos para conservar en forma literaria la historia y las enseñanzas de los valores fundamentales que cohesionaban a la nación, los que de esta manera se transmitían en todas las ceremonias familiares y comunitarias usando como instrumentos educativos, la memorización y la repetición.
 

PUEBLOS/CARACTERISTICAS

MAYAS

AZTECAS

INCAS

Estructura Social
Separada por clases
Separada por clases
Separada por clases
Unidad de Organización social
Milpa
Calpulli
Ayllu
Sistema de producción
Familiar con compromiso colectivo
Familiar con compromiso colectivo
Familiar con compromiso colectivo
Movilidad social
Limitada
Limitada
Limitada
Religión
Politeísta con un dios dominante
Politeísta con un dios dominante
Politeísta con un dios dominante
Papel de la religión
Impregnaba todos los actos
Impregnaba todos los actos
Impregnaba todos los actos
Educación básica
Familia hasta la pubertad
Familia y centros educativos
Familia
Educación avanzada
Instituciones para varones
Instituciones para varones
Instituciones para varones
Escritura
Jeroglífica, silábica
Ideográfica
Quipus
Política educacional
Estructurada
Estructurada
Estructurada
Compromiso de los gobernantes con la educación
Manifiesta
Fuerte compromiso
Fuerte compromiso
 
En el análisis de este cuadro se puede observar que los avanzados pueblos americanos tenían un sistema educativo que respondía a sus necesidades, impregnado por una fuerte religiosidad; era universal y obligatorio para la formación básica; los altos estudios, estaban reservados para un determinado nivel social, aunque no totalmente excluyente, ya que algunos, que no eran de la nobleza, podían acceder a ella por decisión de los jefes de estado. Se hace notar la importancia que los gobernantes le daban a la educación y el apoyo que brindaban.
Que existían lugares destinados a la transmisión de los conocimientos y la formación de profesionales y maestros.
Que la religión era la gran motivadora del desarrollo de las ciencias.
Que la educación impartida en el seno familiar se continuaba con las mismas bases en el sistema educativo formal.
 
En este trabajo se pretende iniciar una discusión, a través de una aproximación teórica, sobre el estado de la educación de los pueblos americanos a la llegada de los europeos, el grado de avance de su ciencia, la orientación de la misma, la forma de transmitir los conocimientos y la estructura de sus métodos pedagógicos, para la revalorización del costado aborigen de nuestra civilización y la apreciación justa de la contribución de nuestros antepasados a la cultura universal.
Al hacer una revisión de los conceptos antiguos y modernos en los intentos de definir a la universidad se encuentra la de Mondolfo, que dice: " Institución cultural o escuela de grado superior que comprende o aspira a comprender la totalidad de las ramas del conocimiento humano, la universalidad de las clases de especialización del saber y de las formas de preparación científica y técnica superior para el ejercicio de las distintas profesiones intelectuales".
O la de Schleienmacher: "La tarea de la Universidad es despertar la idea de la ciencia en los jóvenes (...) ayudarlos a comprender todo lo individual (...) en sus conexiones científicas próximas, e inscribirlo en una gran conexión en constante relación con la unidad y la totalidad del conocimiento(...)".
Max Scheler sostenía: "...la Universidad quiere ser un totum, el todo, lo omnicomprensivo, esto es, pretende representar la universitas del saber y la cultura".
Aguirre interpreta "...que la Universidad no es una institución cristalizada, sino viva, actuante, espejo y reflejo de su organización interna en relación con los contextos circundantes."
Si, además, se entiende que la universidad tiene como objetivo develar los misterios que el hombre se plantea, se puede concluir, en base a estos conceptos, que:
a.            algunos de nuestros pueblos originarios tenían institutos de altos estudios, comparables a las universidades según las definiciones apuntadas más arriba.
La universidad europea llegó a América con un bagaje importante de conocimientos, ideas, filosofía y técnicas industriales, contribuyendo a la conformación de un nuevo pueblo, pero, se puede afirmar que el espíritu americano se nutre también de otra universidad ancestral, bien estructurada, no definitivamente perdida, ni adecuadamente divulgada, que le agrega al hombre una visión holística, integral, en su relación con el resto de la Creación que, al parecer, subyace en el alma de su gente dándole rasgos particulares y distintivos que deberían servir para nutrir y engrandecer a la humanidad.
 
RECOMENDACIONES
En el pueblo formoseño conviven expresiones pluriétnicas y multiculturales, con un 7 % de población aborigen, esta relación no se observa en la población estudiantil de nuestra Universidad, por lo que sería útil generar líneas de investigación hacia las formas del sistema educativo ancestral y las maneras de enlazarlo con el institucional en todos los niveles y las dificultades que tienen nuestros comprovincianos de los pueblos originarios para acceder a estudios superiores.
 
AGUIRRE, Irene M., LA UNIVERSIDAD ARGENTINA: SU DINAMICA EN RELACION CON LOS CONTEXTOS CIRCUNDANTES, Formosa, Argentina. Post-grado: Especialidad en Docencia Universitaria. Facultad de Administración Economía y Negocios. Universidad Nacional de Formosa, 2.003.
CROUZET, Maurice, HISTORIA GENERAL DE LAS CIVILIZACIONES, Vol. 4 por MOUSNIER, Roland, Libro Primero, Capítulo Primero, Traducido por Juán Reglá, Destino, Barcelona, 4° edición, 1974.
EJERCITO ZAPATISTA DE LIBERACIÓN NACIONAL, Subcomandante Marcos, El Mundo: Siete pensamientos en Mayo del 2003, Boletín de La Fogata Año 3, México.
JAEN ROJAS, Alejandro, Modelos matemáticos del cosmos de los indígenas mayas precolombinos, Monografía, Universidad Estatal a Distancia, Fundación CIENTEC, Matemática y ciencia de los calendarios. html. Cientec.or.cr. Costa Rica.
LEVENE, Ricardo, HISTORIA DE AMERICA, t. 1 por DAUS, Federico y DE APARICIO, Francisco, Buenos Aires, W. M. Jackson Inc., 1940.
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MONDOLFO, Rodolfo, UNIVERSIDAD: PASADO Y PRESENTE, colección Cuadernos de EUDEBA N° 154, Buenos Aires, EUDEBA, 1966.
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LIBROS Y DOCUMENTOS CONSULTADOS EN RECOPILACIONES
Libro del POPOL VUH
Libros del CHILAM BALAM
Códice de DRESDE
Códice TRO-CORTESIANO
Códice PERESIANO
FRAY DIEGO DE LANDA, Relación de las cosas de Yucatán
Códice CHIMALPOPOCA
Códice del REAL PALACIO
Códice MENDOCINO
EXPERIENCIA PERSONAL EN TERRENO 
 
 
(*) Médico, Docente de la Universidad Nacional de Formosa, ex–Ministro de Desarrollo Humano y actual Coordinador Ejecutivo del Instituto Provincial de Acción Integral para el Pequeño Productor Agropecuario (PAIPPA) de la Provincia de Formosa, Argentina
Contacto: albertozorrilla@hotmail.com
 

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